Mientras procuro disciplinarme en las cosas de todos los dias,para no sentirme como “o homen sozinho” (el trabajo que tapa todo,las actividades extra q son pocas,las obligaciones) me encuentro con un amigo que ambos conocemos.
Me pregunta por Ella y Yo antes que nada le respondo automáticamente “la extraño!”.
Hablamos de un millon de cosas en 10 minutos, pero siempre vuelvo a mencionarla...(a nombrarla como en una publicidad de los 2000).Ahora viajando a seguir con mi rol de Homo Economicus se me dibuja una sonrisa en la cara pensando y recordando todos los momentos,todos! Aun los minimos; aun los de las interminables peleas titánicas...dije todos.
Mientras que voy a otro de los lugares que tambien he ido con Ella, surge entonces lo inevitable de pensarla...sin caer en el Tango Porteño puedo revivir las sensaciones y sufro su ausencia eterna de 16 eternos soles. Las mañanas con olor a café y sabor de chocolate, el entredia en el medio del contaminado vertigo de Baires, correr hasta el Café Tortoni y alguna escapada de (3) timbrazos que aprueban o la licencia de “cortar” la tarde y sumergirnos en la cama transpirando a morir...dibujando poses que parecen ineditas, corriendo riesgos innecesarios pero consecuentes por la lujuria y las marcas placenteras que quedan en la piel...No puedo ni podria no mirarla a los ojos. Me emociona, me “toca” bien en el fondo y me erotiza hasta renovar mis fuerzas el hecho de mirarla a los ojos en “ese” momento.
Ahora quiero sentir sus huellas en mi cuerpo, quiero escuchar su voz sentenciándome en “su” perfecto español, quiero verla otra vez en su sensual ritual “después de la ducha” mientras elije la ropa que se pondra. Tambien extraño sus ansiedades de las cosas “listas para ayer” o de lo contrario la muerte...La melancolica forma de pensarla, no es porque Ella no esta.
Ella esta en todos mis minutos y en todos los huecos de mi espacio...solo tendría que estirarme un poco para poder tocarla. Siempre late y “pulsa” dentro Mio como una granada cargada de apasionada dinamita de Vida.En este dia 2 procuro despegarme del HOMEN SOZINHO...por que? Porque tengo FE...Ella es la FE...
02 febrero 2005
De la importancia de los aliados
El guerrero de la luz que no comparte con los demás la alegría de sus decisiones, jamás conocerá sus propias cualidades y defectos.
Por lo tanto, antes de empezar a hacer nada, busca aliados, gente que se interesa por lo que estás haciendo.
No digo: “busca otros guerreros de la luz.”
Digo: encuentra personas con diferentes habilidades, porque la lucha de un guerrero por sus sueños no se diferencia de cualquier otro camino seguido con entusiasmo.
Tus aliados no serán necesariamente aquellas personas a quienes todos miran, ante quienes se deslumbran y de quienes afirman: “no hay nadie mejor.” Muy al contrario: son personas que no temen errar, y por lo tanto yerran mucho. Es por ello que lo que hacen no siempre es elogiado o reconocido.
Pero es este tipo de persona el que transforma el mundo, y tras muchos errores consigue acertar con algo que marcará la diferencia en su comunidad.
Los aliados son personas que no pueden esperar a que las cosas sucedan para después decidir cuál es la mejor postura que se puede adoptar: ellos deciden a medida que actúan, aun sabiendo que ese tipo de comportamiento es muy arriesgado.
Convivir con los aliados es importante para un guerrero de la luz; juntos, todos entienden que, antes de escoger el objetivo, son libres de cambiar de idea. Pero, después de haber determinado el objetivo, se concentran sólo en los pasos que deben dar. Y a medida que caminan, piensan: “cada paso requiere mucho esfuerzo, pero vale la pena correr el riesgo, vale la pena apostar la propia vida.”
Los mejores aliados son aquellos que no piensan como la mayoría de la gente. Por eso, al buscar compañeros para compartir el entusiasmo por el sueño, es importante creer en la intuición, y no dar importancia a los comentarios ajenos. La mayor parte de los seres humanos siempre juzga a los demás teniendo como modelo sus propias limitaciones, y a veces la opinión de la mayoría está llena de miedos y prejuicios.
Únete a todos los que experimentan, se arriesgan, caen, se hacen daño, y se vuelven a arriesgar. Apártate de aquellos que afirman verdades, critican a quienes no piensan como ellos, jamás darían un paso sin estar seguros de que se les respetará por ello, y prefieren la comodidad de la certeza que la tensión de la duda.
Únete a los que se exponen y no temen ser vulnerables: éstos miran lo que hace su prójimo, no para juzgarlo, sino para admirarlo por su valentía y dedicación.
Tal vez el guerrero se sienta tentado a pensar que su sueño no interesa a todo el mundo, como por ejemplo a los panaderos o a los agricultores. Pero ellos tendrán en el guerrero de la luz un buen modelo de perseverancia y valor. Y un panadero tiene muchas cosas que enseñar, tales como la mezcla exacta de los ingredientes, que se basa más en la intuición que en la técnica. Un agricultor puede mostrar la importancia de la paciencia, del sudor, del respeto a las estaciones, y de la inutilidad de blasfemar contra las tormentas, porque es una pérdida de tiempo.
Por lo tanto, cada uno tiene algo diferente que enseñar, y es la suma de estas diferencias lo que llamamos “sabiduría.”
Únete a los que son flexibles, y entienden las señales del camino. Son personas que no dudan en cambiar su rumbo cuando se encuentran con una barrera infranqueable, o cuando vislumbran una oportunidad mejor. Poseen la cualidad del agua: deslizarse entre las rocas, adaptarse al curso del río, a veces transformarse en lago, hasta que la depresión esté llena y pueda continuar su camino, pues el agua no olvida que su destino es el mar, y tarde o temprano deberá llegar hasta él.
Únete a los que jamás dirán: “ya he terminado, tengo que parar aquí.” Porque así como el invierno sigue a la primavera, nada termina nunca, y la senda del guerrero es un camino sin fin. Después de alcanzar su objetivo, encuentra un nuevo desafío, y hay que volver a empezar, poniendo siempre en práctica todo lo que aprendió mientras caminaba.
Únete a los que cantan, cuentan historias, disfrutan de la vida, y tienen alegría en los ojos. Porque la alegría es contagiosa, y siempre impide que la gente se deje paralizar por la depresión, la soledad y las dificultades.
Únete a quien camina con la cabeza erguida, aunque tenga lágrimas en los ojos. Apártate de quien camina con la cabeza erguida porque nunca lloró, porque nunca miró a los lados.
Un verdadero guerrero de la luz no confunde la arrogancia con la autoridad, la alegría con la superficialidad, la persistencia con la impaciencia. Él tiene sus dudas, a veces se siente oprimido por la soledad, pero sabe que existe mucha gente que piensa como él, y que encontrar a sus verdaderos aliados es tan sólo cuestión de tiempo.
Por lo tanto, antes de empezar a hacer nada, busca aliados, gente que se interesa por lo que estás haciendo.
No digo: “busca otros guerreros de la luz.”
Digo: encuentra personas con diferentes habilidades, porque la lucha de un guerrero por sus sueños no se diferencia de cualquier otro camino seguido con entusiasmo.
Tus aliados no serán necesariamente aquellas personas a quienes todos miran, ante quienes se deslumbran y de quienes afirman: “no hay nadie mejor.” Muy al contrario: son personas que no temen errar, y por lo tanto yerran mucho. Es por ello que lo que hacen no siempre es elogiado o reconocido.
Pero es este tipo de persona el que transforma el mundo, y tras muchos errores consigue acertar con algo que marcará la diferencia en su comunidad.
Los aliados son personas que no pueden esperar a que las cosas sucedan para después decidir cuál es la mejor postura que se puede adoptar: ellos deciden a medida que actúan, aun sabiendo que ese tipo de comportamiento es muy arriesgado.
Convivir con los aliados es importante para un guerrero de la luz; juntos, todos entienden que, antes de escoger el objetivo, son libres de cambiar de idea. Pero, después de haber determinado el objetivo, se concentran sólo en los pasos que deben dar. Y a medida que caminan, piensan: “cada paso requiere mucho esfuerzo, pero vale la pena correr el riesgo, vale la pena apostar la propia vida.”
Los mejores aliados son aquellos que no piensan como la mayoría de la gente. Por eso, al buscar compañeros para compartir el entusiasmo por el sueño, es importante creer en la intuición, y no dar importancia a los comentarios ajenos. La mayor parte de los seres humanos siempre juzga a los demás teniendo como modelo sus propias limitaciones, y a veces la opinión de la mayoría está llena de miedos y prejuicios.
Únete a todos los que experimentan, se arriesgan, caen, se hacen daño, y se vuelven a arriesgar. Apártate de aquellos que afirman verdades, critican a quienes no piensan como ellos, jamás darían un paso sin estar seguros de que se les respetará por ello, y prefieren la comodidad de la certeza que la tensión de la duda.
Únete a los que se exponen y no temen ser vulnerables: éstos miran lo que hace su prójimo, no para juzgarlo, sino para admirarlo por su valentía y dedicación.
Tal vez el guerrero se sienta tentado a pensar que su sueño no interesa a todo el mundo, como por ejemplo a los panaderos o a los agricultores. Pero ellos tendrán en el guerrero de la luz un buen modelo de perseverancia y valor. Y un panadero tiene muchas cosas que enseñar, tales como la mezcla exacta de los ingredientes, que se basa más en la intuición que en la técnica. Un agricultor puede mostrar la importancia de la paciencia, del sudor, del respeto a las estaciones, y de la inutilidad de blasfemar contra las tormentas, porque es una pérdida de tiempo.
Por lo tanto, cada uno tiene algo diferente que enseñar, y es la suma de estas diferencias lo que llamamos “sabiduría.”
Únete a los que son flexibles, y entienden las señales del camino. Son personas que no dudan en cambiar su rumbo cuando se encuentran con una barrera infranqueable, o cuando vislumbran una oportunidad mejor. Poseen la cualidad del agua: deslizarse entre las rocas, adaptarse al curso del río, a veces transformarse en lago, hasta que la depresión esté llena y pueda continuar su camino, pues el agua no olvida que su destino es el mar, y tarde o temprano deberá llegar hasta él.
Únete a los que jamás dirán: “ya he terminado, tengo que parar aquí.” Porque así como el invierno sigue a la primavera, nada termina nunca, y la senda del guerrero es un camino sin fin. Después de alcanzar su objetivo, encuentra un nuevo desafío, y hay que volver a empezar, poniendo siempre en práctica todo lo que aprendió mientras caminaba.
Únete a los que cantan, cuentan historias, disfrutan de la vida, y tienen alegría en los ojos. Porque la alegría es contagiosa, y siempre impide que la gente se deje paralizar por la depresión, la soledad y las dificultades.
Únete a quien camina con la cabeza erguida, aunque tenga lágrimas en los ojos. Apártate de quien camina con la cabeza erguida porque nunca lloró, porque nunca miró a los lados.
Un verdadero guerrero de la luz no confunde la arrogancia con la autoridad, la alegría con la superficialidad, la persistencia con la impaciencia. Él tiene sus dudas, a veces se siente oprimido por la soledad, pero sabe que existe mucha gente que piensa como él, y que encontrar a sus verdaderos aliados es tan sólo cuestión de tiempo.
01 febrero 2005
Para Yair y para su Sur, Myriam...nuestro "2"
Vuelvo al Sur
(Fernando E. Solanas,Astor Piazzolla)
Vuelvo al Sur,
como se vuelve siempre al amor,
vuelvo a vos,
con mi deseo, con mi temor.
Llevo el Sur,
como un destino del corazon,
soy del Sur,
como los aires del bandoneon.
Sueño el Sur,
inmensa luna, cielo al reves,
busco el Sur,
el tiempo abierto, y su despues.
Quiero al Sur,
su buena gente, su dignidad,
siento el Sur,
como tu cuerpo en la intimidad.
Te quiero Sur,
Sur, te quiero.
Vuelvo al Sur,
como se vuelve siempre al amor,
vuelvo a vos,
con mi deseo, con mi temor.
Quiero al Sur,
su buena gente, su dignidad,
siento el Sur,
como tu cuerpo en la intimidad.
Vuelvo al Sur,
llevo el Sur,
te quiero Sur,
te quiero Sur...
(Fernando E. Solanas,Astor Piazzolla)
Vuelvo al Sur,
como se vuelve siempre al amor,
vuelvo a vos,
con mi deseo, con mi temor.
Llevo el Sur,
como un destino del corazon,
soy del Sur,
como los aires del bandoneon.
Sueño el Sur,
inmensa luna, cielo al reves,
busco el Sur,
el tiempo abierto, y su despues.
Quiero al Sur,
su buena gente, su dignidad,
siento el Sur,
como tu cuerpo en la intimidad.
Te quiero Sur,
Sur, te quiero.
Vuelvo al Sur,
como se vuelve siempre al amor,
vuelvo a vos,
con mi deseo, con mi temor.
Quiero al Sur,
su buena gente, su dignidad,
siento el Sur,
como tu cuerpo en la intimidad.
Vuelvo al Sur,
llevo el Sur,
te quiero Sur,
te quiero Sur...
31 enero 2005
Gustavo me ayuda a decirte ... como es Tu cicatriz en Mí...
30 enero 2005
Saudades Porteñas

Quizas esto te de una minima idea de lo que para Mi es tan profunda la saudade Porteña...
Desejo a Você...
(Carlos Drummond de Andrade)
"Fruto do mato
Cheiro de jardim
Namoro no portão
Domingo sem chuva
Segunda sem mau humor
Sábado com seu amor
Filme do Carlitos
Chope com amigos
Crônica de Rubem Braga
Viver sem inimigos
Filme antigo na TV
Ter uma pessoa especial
E que ela goste de você
MÚSICA DE TOM COM LETRA DE CHICO
Frango caipira em pensão do interior
Ouvir uma palavra amável
Ter uma surpresa agradável
Ver a Banda passar
Noite de lua cheia
Rever uma velha amizade
Ter fé em Deus
Não ter que ouvir a palavra NÃO
Nem NUNCA, nem JAMAIS e ADEUS.
Rir como criança
Ouvir canto de passarinho.
Sarar de resfriado
Escrever um poema de amor
Que nunca será rasgado
Formar um par ideal
Tomar banho de cachoeira
Pegar um bronzeado legal
Aprender um nova canção
Esperar alguém na estação
Queijo com goiabada
Pôr-do-Sol na roça
Uma festa
Um violão
Uma seresta
Recordar um amor antigo
Ter um ombro sempre amigo
Bater palmas de alegria
Uma tarde amena
Calçar um velho chinelo
Sentar numa velha poltrona
Tocar violão para alguém
Ouvir a chuva no telhado
Vinho branco
Bolero de Ravel
E muito carinho meu."
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